Entrevistas

Formación e Inteligencia Emocional

Este jueves entrevistamos a Cristina Martínez Ballestero, fundadora de Umanbi y experta en transformar organizaciones en Organizaciones Emocionalmente Inteligentes. Su experiencia directa dirigiendo equipos y llevando programas de Inteligencia Emocional y Mindfulness la convierten en todo un referente. Así pues, en la siguiente entrevista abordamos la importancia de formar a los empleados en Inteligencia Emocional para el éxito organizacional.

Bienvenida, Cristina. Antes de comenzar, nos gustaría saber más sobre ti y tu compromiso con el cuidado de las personas en la gestión de RR.HH.

Durante 15 años trabajé como gerente en una multinacional del sector textil. Mi función era dirigir distintas tiendas así que gran parte de mi trabajo consistía en mantener a las personas motivadas para conseguir buenos resultados. Ponía mucho foco en conseguir los objetivos y para ello me di cuenta de que era indispensable que las personas estuviesen comprometidas. Recuerdo que colgué un cuadro en mi despacho con una frase que encontré por internet y que se convirtió en una referencia para mi día a día: “El trabajo más productivo es el que sale de una persona contenta”.

Día a día estaba muy atenta a lo que sucedía a mi alrededor, a los gestos de las personas de mi equipo, tono de voz… puedes descubrir mucho sobre cómo están las personas, sobre su compromiso…etc simplemente estando atenta. No dejaba pasar ninguna conversación difícil, la verdad que si preguntas a personas que trabajaban conmigo en aquel momento te dirán que era muy exigente con los resultados, pero siempre intentaba hacer cada cosa haciendo sentir a las persona cuidadas, respetadas, seguras y para eso necesitas mucha Inteligencia Emocional.

Poco a poco me fui formando en este campo, además de empezar a practicar Mindfulness como un medio para quitar algo de estrés diario y mira por dónde, las dos cosas tenían mucho que ver. Es imprescindible manejar bien la atención y familiarizarnos con los procesos de nuestro cerebro que es lo que entrena Mindfulness para poder luego ser conscientes de nuestras emociones, comportamientos y las de los demás, esta es una habilidad clave para ser Emocionalmente Inteligente.

Sentía que cada vez hacía mejor mi trabajo y que las personas que me rodeaban “brillaban” más que nunca. Así que en un momento dado decidí dedicar todo mi tiempo a formar en este campo, realmente creo que son necesarios líderes Emocionalmente Inteligentes en todos los sectores no solo en el mundo de la empresa.

  • Mejora la adaptación de nuevos empleados.
  • Aporta valor a la marca empleadora.
  • Disminuye el estrés del empleado y fomenta la autoevaluación.

Entrando directamente en materia, ¿en qué consiste la inteligencia emocional en relación con las organizaciones?

La Inteligencia Emocional básicamente es la capacidad de reconocer las emociones propias y las de otras personas y utilizar esta información para guiar el pensamiento y el comportamiento sabiamente. Como cualquier otra cosa se puede usar con distintos fines, para mí es un método por maximizar el bienestar: Se trata de cuidar de ti y de las personas que te rodean y de ahí se derivan muchos beneficios importantes para las organizaciones como mejor rendimiento, colaboración, creatividad, liderazgo…

No olvidemos que todos queremos sentirnos seguros, felices, realizados, que nuestras vidas tengan un significado y propósito, también queremos sentir conexión con las personas que nos rodean, que nos respeten y nos aprecien. Este deseo va siempre con nosotros, no se queda en la puerta cuando entras al trabajo o cuando actúas como el cliente. Para ser capaces de generar un ambiente así es imprescindible la Inteligencia Emocional.

Es tan importante que el Foro Económico Mundial señala a la Inteligencia Emocional como una de las 10 habilidades clave más demandadas en las organizaciones, estudios como “Future of Work 2022”, “Deloitte Global Human Capital Trends Survey” y “Gallup” también lo confirman.

¿Por qué es importante formar a los empleados en esta área?

Si te pregunto por las características que tiene que tener para ti un buen jefe la mayoría de cosas que vas a decirme tendrán que ver con la Inteligencia Emocional: Que sepa inspirar y motivar a otros, que muestre integridad y honestidad, que se comunique con efectividad pero también con afectividad, que sepa colaborar y promueva el trabajo en equipo, que fomente relaciones significativas con las personas…

El dominio de la inteligencia emocional es el mayor diferenciador individual en el liderazgo hoy en día. Se calcula que el 90% de la diferencia de los líderes sobresalientes está vinculada a su Inteligencia Emocional.

Pero, además, con la transformación de la Sociedad Industrial en una Sociedad del Conocimiento han cambiado las habilidades clave de un trabajador. En estos momentos, es de suma importancia contar con personas capaces de ver las oportunidades, crear nuevos servicios y productos y lo suficientemente motivadas para generar esa riqueza. Digamos que la ventaja ahora está en que las personas den lo mejor de sí mismas. Esta sociedad del conocimiento además es global lo que hace de la colaboración otro factor indispensable.

Si querías tener una fuerza laboral competitiva en el Sociedad Agraria era importante tener a las personas más forzudas, capaces de aguantar trabajos físicos continuados. Si quieres tener una fuerza laboral competitiva hoy es necesario que pongas el foco en cuidar a tus empleados para que ellos den lo mejor de sí y ahí es clave la Inteligencia Emocional.

¿Qué impacto tiene formar en inteligencia emocional a los empleados en su bienestar?

Hoy los empleados de organizaciones en todo tipo de sectores reportan estrés, agotamiento, conflicto, problemas de comunicación, falta de conexión a nivel humano. El liderazgo que se ejerce en muchos casos en lugar de estar centrado en potenciar lo mejor de cada empleado está centrado en la lucha y el miedo. Además, empleados y líderes se enfrentan a continuos cambios y muestran dificultades para cultivar una mentalidad de adaptación. Todo esto influye negativamente en los resultados de las organizaciones.

3 de cada 4 empleados entre 24 y 38 años expresan interés en que sus empresas les den cuidado mental y soporte, para ellos es realmente importante que la compañía para la que trabajan les cuide como personas.

Además, los trabajadores que dicen que sus empleadores les ayudan a sentirse más conectados reportan cuatro veces mayores sentimientos de bienestar en el trabajo.

Los estudios de investigación corroboran que el bienestar de los empleados es esencial para la sostenibilidad y rentabilidad organizacional.

Así que la pregunta que tendrían que estar haciéndose las compañías hoy es: ¿Cómo podemos cuidar de nuestros empleados?

Potenciar la Inteligencia Emocional nos ayuda a ser consciente de nuestros emociones, pensamientos y comportamientos y facilita el desarrollo de habilidades clave para la colaboración como la empatía, la auto-regulación emocional, la motivación, la resiliencia y las habilidades sociales. Fruto de ello, las personas muestran mayor conexión, creatividad, resiliencia y bienestar.

En un estudio realizado por la Dra. Sonja Lyubomirsky acerca de los factores que afectan a la felicidad y el bienestar, descubrió que ninguno estaba relacionado solo con el coeficiente intelectual, la mayoría estaban relacionados con la Inteligencia Emocional.

¿Cuáles son los riesgos de no formar en inteligencia emocional?

La Inteligencia Emocional ayuda a desarrollar habilidades intrapersonales e interpersonales que impactan positivamente en las culturas organizacionales. A no ser que todos nuestros empleados tengan una alta Inteligencia Emocional es necesario que dediquemos recursos a esta parte tan importante del día a día en una organización. Hasta ahora no se prestaba atención, ahora se ha visto el peso que tiene en la cultura de la organización todo lo que sucede dentro: cómo se relacionan las personas entre sí, con los clientes, el grado de compromiso que tienen, el bienestar… en último término tus resultados dependen de todo esto.

Fomentar una cultura corporativa que potencie la autoconsciencia, la regulación emocional, la motivación, la empatía y otras habilidades sociales es una de las principales fortalezas con respecto al capital humano que puede desarrollar una organización.

¿Cuáles son los principales aspectos por considerar a la hora de generar programas de formación en inteligencia emocional?

Hay algunos consejos importantes para que las actuaciones que hagamos en este campo dentro de una organización den resultados y sean realmente efectivas:

Multinivel

Cuanto mayor sea el número de personas que puedan beneficiarse de este tipo de entrenamiento mayor será la transformación en toda la organización. Es importante la formación de los líderes de todos los niveles, incluidos los más altos. La implicación del Ejecutive Team funciona en cascada y ayudará a que los empleados entiendan que es realmente importante para la Organización.

Recuerda que una de las claves para ser un líder inspirador es tener la capacidad de “liderarse a uno mismo” para poder liderar a los demás.

Que en todos los niveles entrenemos a las personas para que desarrollen autoconciencia y autoconocimiento, aprendan a regular mejor sus emociones, descubran su motivación interna, tengan mayor compromiso, aprendan a conectar mejor con otras personas ya sean miembros de su equipo, clientes o proveedores y sean capaces de crear entornos de “seguridad psicológica” es clave.

Alineación con los valores de la Organización

Los valores son los principios que guían los comportamientos y tomas de decisiones en la Organización y son una tabla de salvación a la que recurrir cuando no tenemos clara la conducta a seguir. Chequea que estos valores formen parte de la Organización que quieres:

  • Relaciones profesionales basadas en la confianza
  • Transparencia, honestidad e integridad
  • Adaptabilidad
  • Compromiso para actuar siendo de servicio en cada situación
  • Liderazgo ejemplar
  • Colaboración y trabajo en equipo
  • Importancia de ayudar a otros a desarrollarse
  • Gestión de los conflictos de modo constructivo
  • Importancia de trabajar con bienestar y propósito
  • Buena comunicación

Además, establecer vías para asegurar que todas las personas se comporten acorde con los valores te facilitará la transformación de la cultura corporativa.

Implementar un buen programa formativo

No todos los programas formativos son iguales por eso es necesario investigar qué alternativas hay en el mercado y asegúrate de que eliges el programa que tu organización necesita.

Es muy recomendable que los instructores tengan experiencia y el programa haya sido ya aplicado en otras organizaciones y esté o bien creado o bien adaptado a este tipo de entorno. Asegúrate también de que mida resultados y siga un método basado en evidencias científicas que ayude a cambiar hábitos.

No se trata tanto de saber qué es la Inteligencia Emocional sino de que realmente aprendas a desarrollar esas habilidades: de nada sirva que sepas qué es la empatía si luego no eres empático. Muchos de las formaciones que hay se basan solo en teoría por eso no tienen ningún tipo de impacto.

Una buena alternativa es “Search Inside Yourself” (SIY). SIY es un programa de desarrollo de Inteligencia Emocional para Líderes y Equipos basado en Mindfulness y Neurociencia que es el programa de formación interna más demandado entre los empleados de Google. Organizaciones como SAP, Intel, Netflix, Deutsche Telecom, American Express, Allianz, DHL, IBM, Pfizer, Price WaterhouseCoopers, Volkswagen, Huawei, Visa, Ikea Sweeden, Facebook, Linkedin, BBVA, Ferrovial, Parques Tecnológicos de Euskadi, Banco Santander… ya lo han facilitado a muchos de sus empleados.

“Search Inside Yourself” consigue mejoras en resiliencia, bienestar, enfoque y atención, manejo del estrés, rendimiento, comunicación y colaboración.

Comunicación

Es muy importante que haya una comunicación clara y frecuente sobre las acciones que la organización están haciendo para potenciar la Inteligencia Emocional.

Esto además de mostrar el compromiso de los líderes por integrar estas habilidades en la cultura de la Organización ayuda a que los empleados tengan información frecuente y sepan que ese es algo importante. Intranet, newsletter, boletines, reuniones, carteles en salas de reuniones…es importante que en todas ellas haya un lugar para hablar de acciones, herramientas e hitos con respecto a estas habilidades de Inteligencia Emocional y atención plena que queremos potenciar.

También puedes elegir a algunas personas especialmente interesadas en el tema para que hagan una función de “champions”. Los “champions” ayudan a que otros empleados integren estas nuevas habilidades. Son personas que están interesados en ser parte del cambio, tienen una actitud de servicio y colaboración con los demás compañeros y están dispuestos a compartir aprendizajes. Estos trabajadores son muy importantes para el éxito.

Formación accesible

Es necesario que las acciones formativas que emprendas sean accesibles para todos. Esto repercute en el número de personas que se sumarán y cuantas más personas puedan beneficiarse de este tipo de entrenamiento mayor será la transformación en toda la organización.

Es importante que tengan toda la información, que se creen comunidades de práctica de fácil acceso para todos y que se estimule para que las personas se sumen. Facilitar el acceso te ayudará a ir ampliando el impacto.

Es importante dar continuidad a las acciones que emprendas, si quieres resultados y transformación, es necesario programar formaciones periódicas para continuar potenciando el desarrollo de estas habilidades de Inteligencia Emocional.

¿Qué herramientas se pueden utilizar para asegurar el éxito de este tipo de programas?

En nuestras formaciones damos herramientas para el día a día en la organización: cómo llegar a una reunión enfocados (importante con la cantidad de videoconferencias encadenadas que tenemos) , qué hacer ante una negociación difícil, cómo dar feed back empatizando, cómo tener una conversación difícil, cómo regularse ante un e-mail incendiario o un momento crítico, cómo trabajar con personas que no nos caen bien, cómo sentirnos “conectados” cuando trabajamos en remoto,   cómo gestionar la sobrecarga mental, cómo trabajar cuando surge un obstáculo para tener una mentalidad de crecimiento…etc. Lo importante es que sirvan, la teoría es una cosa, pero por experiencia propia, es el reto que supone.

Algunas de las cosas que recomiendo hacer a la organización son:

-Iniciar un programa de aprendizaje en el que se forme a los empleados.

-Realizar Workshops periódicos para trabajar distintas habilidades de Inteligencia Emocional.

-Crear comunidades de práctica de Mindfulness e Inteligencia Emocional con sesiones semanales dónde además se crea una conexión muy humana entre las personas que asisten.

-Uso de apps como Wise at Work.

-Retos para entrenar habilidades como el de 28 días que realizamos en el programa formativo “Search Inside Yourself”.

-Miniretreats de una mañana, un día… que pueden ser virtuales.

-Speaker series sobre Inteligencia Emocional.

Agradecemos a Cristina Martínez por haber compartido parte de sus conocimientos con nosotros. Para saber más sobre la importancia de la formación en inteligencia emocional, no dudes conectarte a nuestro próximo directo el 13 de enero a las 17.30h en nuestro canal de Youtube: https://www.youtube.com/watch?v=1_7x3l-hzNo. Entrevistaremos de manera íntegra a Cristina para poder abarcar aspectos como los retos de las empresas en la creación de programas formativos, sus impactos, tips, y mucho más; además de responder todas las preguntas del público. ¡No te lo puedes perder!

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